Después de pasar unos años en Madrid, en 1905 Juan Ramón Jiménez vuelve a Moguer, el pueblo de Huelva donde nació. «Platero y yo» surge del reencuentro del poeta con su tierra natal, su paisaje, sus gentes y sus costumbres. Acompañado del burro Platero, Juan Ramón Jiménez recorre las calles y el campo de Moguer.